La Huerta Hotel - Hotel en el Lago Calima

En general tuvimos una estadía muy agradable, las personas del hotel son muy atentas y amables. La comida deliciosa y muchas preparaciones con productos totalmente orgánicos cosechados en huertas propias.La habitación amplia, limpia, cama king muy cómoda, televisor en buen estado.Son pet friendly, permiten completa circulación de la mascota incluso en zonas comunes como la piscina (mientras el perrito se comporte bien y se mantenga con correa y collar) y en los días que estuvimos varias familias además de nosotros tenían peludito.El paisaje maravilloso y las instalaciones del hotel muy bien cuidadas.Solo unas recomendaciones porque por supuesto planeamos volver...- Nos dijeron que había piscina y jacuzzi climatizados, pero solo el jacuzzi estaba caliente. La piscina fue más complicado y al preguntar si la calentaban nos dijeron que solo se hacia cuándo habían muchos huéspedes. Este aspecto se debe cumplir así haya sólo una persona hospedada, pues para nosotros fue definitivo al decidir hospedarnos allí y en la noche no pudimos disfrutar mucho la piscina por el frío y el jacuzzi mantiene lleno por esta razón.- La habitación podría estar mejor preparada para la llegada de los huéspedes... No tuvimos shampoo ni otras amenities y estuvimos cuatro días, por lo que nos tocó ir a comprar al pueblo (que queda a más de 30 minutos en auto)Para el precio de la noche (que lo vale totalmente) se deberían incluir estos artículos.- La cocina cierra muy temprano para nuestra consideración y teniendo en cuenta que era un fin de semana con festivo incluido.- Tampoco habían bebidas en el mini bar y las ventanas estaban cerradas al llegar por lo que había un aroma no tan fresco.- La habitación en la que nos hospedamos estaba junto a un guadual que contantemente golpeaba el edificio y para personas con sueño ligero (en mi caso) me desperté varias veces. Por supuesto no es culpa del hotel, pero si tienen sueño ligero les recomiendo que pregunten por una habitación que no esté junto al guadual.Lo demás estuvo bastante bien, fueron días de mucho descanso. Gracias al hotel y a sus colaboradores por hacer de nuestra estancia muy agradable. Sin duda volveremos.

La verdad tuve una mala experiencia con la estadía siento que el hotel se queda corto en muchos aspectos, las toallas son demasiado viejas, los colchones son incómodos, realmente es una colchoneta de baja calidad, el desayuno es muy limitado, no ofrecen nada para los niños, y siento que una cosa es ecosostenible y otra es en ofrecer lo mínimo al cliente, décimos volver al hotel porque nos hospedamos cuándo era MS la huerta y la verdad a la fecha no han cambiado nada y han pasado 7 años, no han invertido en ninguna remodelación para el valor que de paga por habitación se encuentran mejores cosas en otros lugares.

Agradable lugar , muchas actividades al aire libre , comida organica

El hotel está muy bien! La ubicación, las vistas, el entorno, el servicio y la cocina son muy buenos.Me gustaría destacar como positivo la comida del restaurante y la calidad del producto, donde todo es orgánico y de temporada. Fue una pena que el almuerzo del último día no estaba bueno. Mi pareja pidió unas costillas que no se podían comer de los refritas que estaban. Los dos teníamos ensaladas en los platos, que no habían sido aliñadas, no sabían a nada, lo que fue una sorpresa porque la noche anterior habíamos cenado con ensaladas y el aliño estaba buenísimo. Pedimos vinagreta o algo para aliñarlas y nos dijeron que no tenían.Por otra parte, y lo que me parece bastante incómodo y poco seguro, es que hagas la reserva a través de la web propia del hotel, y el hotel no tenga información de si te han hecho algún cobro, ni el importe por el que te lo han hecho. ¿A donde van los datos de las tarjetas de crédito? ¿Quien se queda con esta información? Al día siguiente de haber hecho la reserva me llegó en email indicando que me habían hecho un cargo por valor de 50% de la reserva (todo en inglés), pero el hotel no tenia esta información y me lapidieron tres veces: un día que les contacté para realizar una reserva en el restaurante, el día de la llegada, y el día de la salida de nuevo. Poco control en este caso e incomodidad para mí como clientePor último y como sugerencia, creo que el establecimiento sería ideal si fuera solo para adultos. Es un oasis de paz que invita al descanso y a la desconexión y esto se pierde al haber niños en la piscina. Creo que tendrían un nicho de mercado específico que pagaría aún más por alojarse allí. En Europa esta cogiendo fuerza este concepto, y lo agradecen incluso las personas que tienen niños cuando pueden escaparse a desconectar.

Una experiencia inolvidable. Comida sana cultivada sin agro tóxicos y una filosofía de vida que nos hace reflexionar sobre cómo hemos llevado nuestras vidas. O simplemente un lugar para descansar y comer rico, realmente rico.

Es un lugar muy bonito, aprendimos mucho con don Ivan en la huerta del hotel.El servicio es muy bueno, la comida muy rica, solo que se debe lavar un poquito mejor la lechuga, el espacio en sí es muy agradable, las habitaciones 1A

La única experiencia regenerativa en Colombia, un hotel que va mucho más allá del confort, comida excelente, orgánica y llena de colores con educación ambiental de la mano de profesionales. Recomendadísimo.

El hotel muy bonito pero la comida muy mala y desde el hotel no se alcanza a ver el lago solo tiene vista a la piscina .a las montañas y a un guadual

Fue una buena experiencia, un lugar perfecto para descansar, las personas que trabajan en el sitio fueron muy amables, hubo algunas cosas que me incomodaron como que al ingresar a la habitación no había toallas y que estábamos de aniversario con mi esposo por lo que reservamos una pérgola para una cena privada y cuando fuimos esta ya estaba ocupada ya que hubo una confusión con la reserva de esta, lo cual me molestó mucho al punto de querer irme ya que era una fecha muy especial, sin embargo supieron manejar la situación, fueron muy pacientes conmigo y finalmente pudimos acceder a la pérgola, la comida estuvo espectacular y el personal muy atento, lo que compensó el inconveniente, en general el sitio muy bonito y agradable para descansar, la zona húmeda nos gustó mucho, la piscina es muy relajante, y nos encantó poder ir con nuestras mascotas, esperamos volver.

Excelente lugar para sentirse cerca de la naturaleza. La caminata por el sendero y la huerta, es algo muy gratificante. La atención y el aseo, muy buenos. Las habitaciones y la cama, bastante confortables. Desde este hotel, es muy fácil acceder para dar un paseo por el lago Calima y Reservas Naturales. Buen desayuno. Muy buena vista a un sector de la cordillera occidental. Por mejorar: la temperatura del agua caliente.u