an&an Moda y Cafe

En el momento de iniciar el servicio, me atendió la propietaria del negocio, muy amable, ella misma tomó las medidas. Me hicieron una falda y una blusa, viajé de Bogotá a Neiva exclusivamente a probarmelas en el momento agendado. La blusa era diferente a la acordada, la falda también tenía ajustes por hacer. Me atendieron las costureras, la propietaria no se presentó aunque se había programado previamente la cita. Los ajustes no fueron bien recibidos por ellas, claro, implicaba más trabajo. Escribí posteriormente a la propietaria expresandole mi inconformidad con la costura y con la atención y su respuesta tuvo un tinte ironico y fue completamente a favor de sus colaboradoras. Días después recibí la ropa en Bogotá y como era de esperarse, nada se veía bien. La plata se perdió completamente.